6/4/10

Las 8 tendencias que veremos en la Comunicación Interna en España


El 25 de marzo asistí a la jornada de disertaciones organizada por la APD, donde Nuria Vilanova explicó las 8 tendencias que a corto, medio y largo plazo veremos en la Comunicación Interna en España

La ponencia de la presidenta de Inforpress, “La Comunicación Interna hoy: Claves de gestión y tendencias”, tuvo lugar en el marco de la jornada Recuperar los valores para seguir compitiendo: La comunicación, clave en la consecución de los resultados.

La presidenta de Inforpress destacó que los valores serán el anclaje de las organizaciones para mover a la acción. Según Vilanova, "difícilmente conseguiremos que los empleados se despierten soñando con que su objetivo este año es crecer un tanto por ciento. Los objetivos de negocio tienen que vincularse a los valores. Hay que emocionar a nuestros colaboradores, implicarlos".

La segunda tendencia es que las compañías aprenderán a comunicarse aprovechando el potencial de las redes espontáneas. Hasta este momento, indicó Vilanova, se ha comunicado en vertical, horizontal y transversal pero ahora es necesario que las organizaciones abran las puertas a la creación de grupos y comunidades espontáneas entre sus empleados.

La presidenta de Inforpress dio una vuelta de tuerca al concepto storytelling, y ha resaltado que "es preciso contar historias comprensibles y cercanas para nuestros públicos internos". De esta manera, "seremos más creíbles, fiables, cercanos y, por tanto, más efectivos", añadió. Igual de relevante es darles voz y el papel protagonista a los empleados. No hay que dirigirse únicamente a los directivos sino a los colaboradores en general. Con ello se conseguirá una mayor identificación e implicación de los trabajadores.

Además, Vilanova considera que para ganar hay que apostar e incorporar las TICs, y destacó que el lema be social and mobile, my friend cobra especial importancia y permite llegar a los empleados que no tenían acceso a herramientas históricamente corporativas como intranet. Las organizaciones han de ser ágiles en la aplicación de las nuevas tecnologías en la Comunicación Interna. En su opinión, "es preciso aprovechar los nuevos medios sociales y el móvil para fidelizar a los colaboradores, divulgar la estrategia y alcanzar resultados".

Por otro lado, en un mundo lleno de impactos constantes sobre los públicos si quieres comunicar en las organizaciones necesitas impactar. Tal y como explicó Vilanova, el mensaje debe contar con: mensajes principales, valores y storytelling, en este orden. El nuevo lenguaje que llega a los empleados en estos momentos es el audiovisual. "El vídeo ya está consolidado como pieza clave de CI", declaró Vilanova, "los recursos están disponibles y no hay límite a la creatividad".

Para terminar, Nuria Vilanova evidenció que la Comunicación Interna se lleva a cabo en tiempo real. "La velocidad de acción es clave y prioritaria. Todos en la empresa somos marketers, todos debemos estar atentos al mercado y la CI es la vía rápida para ello", concluyó.


FUENTE: inforpress.es

11/9/09



Ejemplo de como NO invertir en comunicación interna


Ayer caminando por Barcelona, me llamó la atención un cuadro perfectamente embalado colocado sobre un contenedor de basura, me acerqué intrigada mientras pensaba en la decadencia del arte y las motivaciones que habría tenido su dueño para deshacerse de él, cuando al llegar a su lado comprobé que no se trataba de una obra de arte, sino de una auténtica pieza de comunicación interna...arrojada sin más a la basura.

La pieza consistía en una lámina enmarcada con un montaje algo basto, de dos manos retocadas, que sostenían una probeta de vidrio que se superponía a la copa de un pino, con 119 nombres (si, los conté) en un color que dificultaba la lectura, encabezada por una gran frase en amarillo que agradecía a los empleados de un laboratorio, y por supuesto la firma del director y el logotipo al pie.

Pensé en el pobre director y sus expectativas puestas en la ilusión que causaría a sus empleados recibir el galardón que probablemente él mismo ideó….¿quizá si el montaje hubiera sido realizado con más gusto y nociones estilísticas el empleado hubiera decidido colgarlo en el salón de su casa?… Dejémoslo claro: NO.
Esta pieza hablaba de la empresa y su director, e ignoraba completamente al empleado. La comunicación formal enunciaba el concepto de “consideración al empleado”, y la informal contradecía completamente el mensaje.

Porqué? Imaginemos a ese mismo director, supongamos que lleva su coche al mismo taller hace años y un buen día el dueño del taller viendo que aumentó su recaudación regala a todos los clientes un cuadro agradeciendo su aporte en su crecimiento económico…¿el director lo colgaría en la sala de su casa aunque a su mujer no le guste o no armonice con la decoración?...probablemente no… ¿porqué entonces ese mismo director supuso que sus empleados si lo harían?

Este es un caso muy frecuente de derroche de presupuesto: buenas intenciones, traducidas en acciones de comunicación aisladas que parecen nunca alcanzar el objetivo esperado, donde la falta de políticas corporativas de comunicación estratégica profesional, y los estilos de comunicación interjerárquica unidireccional, se pagan caro.

Más allá de la necesidad satisfecha del director de plasmar su deseo de decir gracias, ¿hubo algún tipo de reflexión empática acerca de cómo los empleados necesitan sentir que se valora y agradece su trabajo? Que no son sólo bienes de uso de la empresa, que sus deseos importan, que mientras mejor lo hagan mejor les irá a ellos? que su función no pasa por escuchar sumisamente los mensajes de la dirección?

El mismo presupuesto podría haberse canalizado en acciones que incluso sin estar firmadas por el logo pudieran haber sido mucho más rentables, acciones que fidelicen empleados, que les haga sentir que de verdad importan, que toda creatividad extra que aporten les reportará un beneficio...en fin, construyendo una verdadera cultura de Sinergia.

Así que atentos: al igual que en las comunicaciones externas, en comunicaciones y marketing interno, no importa lo que la empresa quiere decir, sino qué quiere lograr y fundamentalmente de qué modo necesita el público escucharlo para que produzca los resultados que estratégicamente se planteó la Organización y evitar así que la acción que elijamos termine en la basura y sin desembalar.

31/8/09



El Lote de navidad, y el boli de regalo, son efectivos?





La creatividad es especialmente importante en la elaboración de estrategias de comunicación, debido a que uno de los principales obstáculos con los que se encuentran las acciones de comunicación es la invisibilización por saturación: la repetición de acciones similares, por las empresas y su competencia hasta el hartazgo, concecuencia de lo cual el público las naturaliza y dejen de tener efecto, no porque el mensaje sea erróneo, sino sencillamente porque las dejan de ver, el mensaje ni siquiera llega a hacer contacto.

Ejemplos hay muchos: el público interno que percibe el lote de navidad como una obligación más que como una deferencia o el público externo que ya ni mira de quién es el logotipo estampado en un llamativo bolígrafo que le acaban de regalar.

Lo curioso es que ante la evidencia del fracaso de determinadas acciones de comunicación interna o externa, las gerencias no suelen replantearse la estrategia, suelen aumentar el presupuesto, pero repetiendo ideología, se agrega al lote un paté importado de las islas Maldivas o se elige un boli con partes cromadas.

Resultado: en la próxima oportunidad se repite la misma acción, con más calidad, pero con el mismo resultado, INDIFERENCIA.

A veces no se trata de aumentar el presupuesto sino de reconducirlo hacia alternativas más creativas, que despierten a nuestro público objetivo de su letargo sensorial: por ejemplo, en lugar de mejorar el lote, se podría realizar una acción paralela inesperada enviando un detalle a los padres de cada empleado mencionando lo trascendente del trabajo de su hijo y agradeciéndoles por su aporte en este miembro tan valioso de la empresa, ¿a quien no le gustaría recibir una llamada alegre de sus seres más queridos halagados por realizar bien nuestro trabajo?. Al menos despertará una sonrisa.

La creatividad vinculada a la capacidad estratégica permite encontrar soluciones impensadas a problemas que muchas veces parecen estar estancados e instalados en nuestro día a día corporativo.

Pero si queremos creatividad, debemos generarla, es responsabilidad de las gerencias crear una cultura empresarial donde se valoren los activos intangibles como la creatividad, proveyendo de espacios y canales de comunicación que fomenten la creatividad, creando equipos cuya principal finalidad sea pensar en soluciones innovadoras a problemas habituales.

Ya decía Einstein: “Si no quieres obtener siempre los mismos resultados no sigas haciendo siempre lo mismo”


18/8/09

Exposecretarias 2009. Barcelona

El rol clave dentro de las comunciaciones corporativas

12/8/09



Expomanagement 2009.
Crisis vs. Creatividad


A raiz de mi trabajo para la conferencia de uno de los ponentes de Expomanagement 2009 para quien llevo su marca e identidad profesional desde hace tiempo, pude comprobar como allí también la crisis dijo presente filtrándose como temática en la mayor parte de las conferencias.

Más allá de los enfoques de las distintas ramas, todos en algún momento sugerían volver la mirada al trabajo realizado en la base que sostiene a las organizaciones en los momentos difíciles, la base humana.
Nuestra gente será quien según la capacidad de respuesta que hayamos sabido inspirar, nos ayude a salir airosos o por el contrario nos sumerja más en el desasosiego, en caso de no haber podido construir y comunicar una correcta filosofía corporativa donde todos se sientan parte y responsables de un mismo barco.

Una gestión de calidad basada en habilidades de comunicación que fomente la confianza y la creatividad apoyada por una correcto sistema de comunicaciones interna que fidelice equipos humanos con capacidad de respuesta y trabajo en equipo, se redescubre ante contextos de crisis como vitales para generar soluciones de fondo que permitan superar el reto de manera sólida y sostenible en el tiempo, evitando las “soluciones parche” y actitudes de “sálvese quien pueda”.

Las crisis nos recuerdan que lo peor de enfrentarnos a contextos inclementes es descubrir que no contamos con una base sólida, de nada sirven grandes estrategias e inyecciones financieras si ante la tormenta, no supimos generar y comunicar esa sólidez identitaria que parece resquebrajarse recordándonoslo a través de empleados no fidelizados, equipos de trabajo que se desmotivan fácilmente, comunicación sin sinergia, rumores que crecen y boicotean cualquier idea o filosofía de trabajo en equipo, etc.

Si queremos un futuro sostenible, debemos sanear la base, para continuar construyendo el futuro sobre cimientos sólidos.
Este es un buen momento para trabajar en la base con nuestros equipos, transmitir una identidad sólida, mejorar la comunicación interjerárquica, disminuir los sistemas de rumores, fidelizar a nuestros empleados, fomentar las respuestas creativas a traves de sistemas de recompensa que motiven y recordarles que el barco es uno y que todos vamos en él.

La crisis es una excelente oportunidad empresarial para aportar al mercado soluciones impensadas que sin la presión del contexto quizá no hubiéramos podido generar, pero para que estas respuestas creativas germinen, debemos haber preparado el terreno, proveyendo a nuestros equipos de canales claros de comunicación interna, transmitiéndoles una filosofía coherente que valora los aportes de talento, fomenta las sinergias, y principalmente habiendo alineado a toda nuestra gente bajo una identidad corporativa que los contemple como el principal activo de la organización.



3/6/09



Cuando la comunicación impacta en los resultados

Ya hemos hablado de la importancia de diseñar las comunicaciones corporativas evitando la improvisación, vimos que el primer paso es tomar conciencia del verdadero alcance de este rompecabezas: es imprescindible que cada pieza por pequeña que fuere esté contemplada en el diseño para que opere con armonía en el sistema de comunicaciones previsto y haga de la coherencia el hilo conductor de los mensajes emitidos por cada aspecto comunicante de la organización.

De este modo obtenemos una identidad corporativa, sólida, con valores claros, con poder de anclaje en el público, de perdurar en el tiempo y de inspirar al público interno.

Ahora bien, para que cada pequeña parte del complejo sistema de comunicaciones de una empresa contribuya con la ansiada coherencia necesaria para generar un único mensaje corporativo, sólido, creíble e inspirador de confianza, es excluyente que cada miembro de la organización esté alineado con una visión común, y se sienta parte del tema y reconocido en dicha función.

Lo curioso “del juego” de las comunicaciones, es que el poder que habitualmente tienen los directivos, en este fenómeno se iguala al de cualquier otro interlocutor, todos son simples participantes: no pueden elegir que participe quien conviene y dejar afuera a quien no, todo miembro de la organización juega, ya sea por acción u omisión, hable o calle está comunicando y construyendo la identidad del contexto donde trabaja y la calidad del día a día laboral.

Existen casos en los que el mensaje boca-oreja de un empleado de última jerarquía puede anular o directamente sabotear el mensaje corporativo que un director de alto rango, tan cuidadosamente se encargó de definir y comunicar con el objetivo de convencer a un público externo y de conquistar al público interno, sus equipos de trabajo.

Una organización evoluciona positivamente con la visión clara de un líder, aquí se hace evidente la necesidad de líderes entrenados en habilidades de comunicación de excelencia. Un buen líder, se capacita y conoce las reglas del juego, sabe que todos los integrantes de la organización participan, y por lo tanto la mejor forma de que todos los participantes remen hacia el mismo lado es inspirar y hacer partícipes a cada miembro de la definición de la misión y valores identitarios de la Organización.

En la tarea de unificar el compromiso de construir una visión única de la organización, es necesaria la capacitación de todos los sectores de la organización en habilidades de comunicación, no sólo para poder hablar todos "un mismo idioma" y entenderse sino para que sus aportes enriquezcan un sano sistema de diálogos corporativos, donde los equipos se hacen más sinérgicos y productivos, las personas encuentran canales para mostrar y vivir sus talentos, la organización está capacitada para escuchar a los empleados y detectar focos de innovación, creatividad.

Después de todo, como dice Stephen Covey, la aptitud para la comunicación es la más importante para la vida.



27/5/09



COMUNICACIONES, la escencia de la IDENTIDAD CORPORATIVA

La importancia de la comunicación informal.

En el post anterior tomamos conciencia de la necesidad de que las comunicaciones de nuestra empresa sean diseñadas y no espontáneas, para que la identidad corporativa pueda establecerse de manera inequívoca en el mercado, sin dobles mensajes que perjudiquen su anclaje.

En mi labor como consultora habitualmente observo como los esfuerzos de mis clientes por un diseño de comunicaciones de calidad se centra en las comunicaciones que se dan desde la empresa hacia el exterior, osea las comunicaciones comerciales/externas, cuando el verdadero origen de la fortaleza de una identidad corporativa se origina en las comunicaciones internas, ya que son las que mayor influencia ejercen en fortalecer o hacer tambalear los valores que cimientan una identidad corporativa, esa identidad que tanto nos cuesta afianzar en el imaginario colectivo del público.

El primer paso entonces es la toma de conciencia de la necesidad de diseñar las comunicaciones, el segundo paso, es conocer el verdadero alcance de las comunicaciones corporativas más allá de la esfera comercial, para luego operar en la totalidad de áreas implicadas y lograr resultados sostenibles e integrales.

Esto es de vital importancia para que un proceso de consultoría en comunicaciones corporativas tenga éxito, ya que es un fenómeno en el cual los factores no evidentes (como las comunicaciones informales) tienen más peso comunicativo que los factores evidentes y fácilmente controlables (como las comunicaciones formales), pudiendo anular en un descuido los mejores mensajes corporativos.

Para aspirar al éxito, la palabra clave es COHERENCIA, un correcto plan de comunicaciones corporativas, logrará armonizar los discursos de todas las áreas de una organización, cada mensaje que se emita tanto de manera formal como informal, ya sea por un miembro de la plana superior como por un empleado de mantenimiento, tendrán coherencia entre sí, hablarán de lo mismo, y será no lo que se dice sino la coherencia percibida la que hablará de nuestra identidad como organización.

Para verlo más claramente, pensémoslo en un nivel simplificado: tal vez conozcamos por nuestro trabajo a algún personaje que proclama sus valores, quizás se adjudique calificativos como generoso, desinteresado, honesto, trabajador…. pero luego pequeñas evidencias que nos van llegando informalmente de su realidad personal nos envían otro mensaje: en alguna ocasión observamos que es mezquino, nos chirría algún comportamiento falto de afecto con su círculo más cercano, tenemos la sensación de que es asiduo a toda situación que le pueda reportar un beneficio…

Cuál es la identidad que le atribuiremos? la que repite verbalmente una y otra vez? (comunicación externa), la que nos “dice” su contexto íntimo? (comunicación interna-informal)…peor aún! la suma de las dos, la incoherencia entre lo que dice ser y es en realidad es aún peor porque habla de un intento de convencernos de algo que no existe. Y recordemos que el público nunca perdona que lo quieran engañar o lo subestimen.

Es más económico diseñar una coherente identidad corporativa, sólida desde el inicio, que intentar revertir la percepción de una IC incoherente fruto de la improvisación, asi que esforcémonos en diseñar con conciencia todo aquello que comunica la identidad de nuestra organización, ocupémonos de las comunicaciones evidentes, las más visibles, pero esforcémonos especialmente en las subjetivas, informales, y menos evidentes.

El contenido siempre tiene más poder que la forma.